Hago parte de la generación de viejos que luchamos por aprender el manejo de las nuevas herramientas tecnológicas para no quedarnos tan rezagados en la acelerada carrera. Estoy recibiendo clases acerca del uso responsable de la IA (Inteligencia Artificial).
Es así como se me ocurrió pedirle a la ‘comadre’ IA, a partir de unos parámetros susurrados a través de sus biónicos oídos, la redacción de un artículo entorno a la lealtad, y miren el resultado en menos ‘de lo que canta un gallo’:
La Lealtad: Un Valor en Riesgo que Merece ser Recuperado
En una época marcada por el individualismo, la inmediatez y la volatilidad de los vínculos, la lealtad —ese compromiso firme con personas, causas e ideales— parece haber perdido terreno. Ya no basta con declarar fidelidad: hoy, conservarla exige convicción, coherencia y una voluntad contra corriente. Pero, ¿por qué se ha venido menoscabando? ¿Y cómo podemos recuperarla en medio de un entorno que muchas veces premia la conveniencia sobre la integridad?
🧩 ¿Qué es realmente la lealtad?
La lealtad es una expresión de respeto y fidelidad que se mantiene incluso en ausencia de recompensas o vigilancia. Implica actuar de forma coherente con los valores compartidos, sostener compromisos en el tiempo y defender lo que se considera justo, incluso cuando hacerlo representa un sacrificio.
La filósofa española Adela Cortina lo expresa así: “La lealtad implica elegir libremente formar parte de un nosotros, y mantener esa elección incluso en las circunstancias adversas. No es sumisión, es entrega reflexiva.”
📉 Un valor en declive
Diversos estudios sociológicos han identificado una disminución en la valoración de la lealtad, especialmente en contextos laborales, políticos y sociales. En entornos profesionales, por ejemplo, el vínculo entre empleado y empresa ha perdido estabilidad frente a lógicas de rotación, competencia y autooptimización. En la esfera política, la lealtad ciudadana hacia instituciones se ve afectada por escándalos y promesas incumplidas. Y en lo personal, vínculos afectivos se tornan frágiles ante el culto a la gratificación inmediata.
El sociólogo colombiano Alfredo Molano Jimeno advierte que “la cultura de lo desechable ha permeado nuestras relaciones. La lealtad exige tiempo y paciencia, cosas que hoy escasean.”
🧠 Causas de la erosión
Entre los factores que explican esta tendencia están:
– La hiperconectividad: Las redes sociales promueven vínculos superficiales, con múltiples opciones que dificultan el compromiso profundo.
– La lógica de consumo: Se traslada al plano humano, donde personas e ideales pueden ser abandonados cuando ya no se perciben como útiles.
– La pérdida de referentes éticos: En muchos entornos, el éxito se valora por encima de la rectitud, lo que debilita la idea de lealtad como virtud.
🔄 ¿Es posible recuperarla?
Sí, pero exige un giro cultural que reivindique la importancia de los vínculos duraderos, del honor, y de la coherencia personal. Aquí algunas maneras de fortalecer la lealtad:
– Educar en valores desde la infancia, resaltando ejemplos históricos y actuales de lealtad como modelo de conducta.
– Fomentar el pensamiento crítico para distinguir la lealtad de la dependencia o la sumisión.
– Reconocer y premiar comportamientos leales en ámbitos laborales, familiares y sociales.
– Practicar la coherencia personal, que lleva a mantener posiciones con dignidad aun cuando no sean populares.
– Cuidar el diálogo y el compromiso afectivo, dos pilares para sostener la lealtad interpersonal.
🧠 Lo que dicen los expertos
– La psicóloga argentina Laura Gutman señala que “la lealtad no nace del miedo, sino del amor. Es la capacidad de sostener los vínculos desde el respeto, incluso cuando hay desacuerdos.”
– El filósofo colombiano Estanislao Zuleta, en sus reflexiones sobre ética y libertad, plantea que “la verdadera lealtad no es la que se exige, sino la que se ofrece con autonomía.”
– Desde la gestión empresarial, Simon Sinek afirma que “los equipos más sólidos no son los más competitivos, sino los más leales entre sí; eso genera confianza, y la confianza genera excelencia.”
🌱 Un valor que construye comunidad
Lejos de ser una virtud arcaica, la lealtad es profundamente contemporánea. En un mundo que cambia velozmente, necesitamos puentes estables. Ser leal no es aferrarse al pasado, sino comprometerse con lo que da sentido. Quienes practican la lealtad, construyen comunidad; quienes la reciben, aprenden a confiar. Y en ese acto, se multiplica la esperanza.
👉 Esto sí de mi cosecha cerebral: No le metí mano al texto, que si lo requiere para ajustar cuestiones más de forma gramatical (en signos de puntuación, por ejemplo). Y bien, ¿cómo les pareció la película?
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