Hay reglas tácitas que permiten que dos adultos tengan relaciones sexuales; una de ellas es el consentimiento y, la otra, es la comunicación. Esta última puede parecer sencilla, pero la cosa es que no es solo hablar, sino estar de acuerdo antes, durante y después de lo que ocurra entre esas dos personas.
Así que como para gustos los colores, cada uno tiene sus preferencias personales, pero también como pareja deben estar de acuerdo, porque la idea es disfrutar, divertirse, experimentar y no terminar peleados, frustrados y quizás resentidos porque uno de los dos haya hecho algo de más o en el peor de los casos, se haya callado algo.
Recordemos que el sexo está para divertirse, desinhibirse y disfrutar un momento pirotécnico con aquella persona especial. Es un escenario en el que pueden pasar muchas cosas, algunas buenas y otras no tanto, pero eso no significa que se deba tirar la toalla antes de meter el gol.
Es por eso que aquí te hablaremos de 8 malas jugadas que podrían pasar durante ese momento sexy y ardiente:
Sin juegos previos: saltarse los besos, las caricias, el morboseo, es un sacrilegio. Aunque digamos que ya se estaban calentando por el WhatsApp; se mandaron un par de fotos calientes y estaban bien ardientes, ahí es válido. Pero nunca, nunca, llegue y penetre sin antes calentar.
No es porno: si les gusta el porno y les gusta recrear algunas escenas, es válido, pero que no se les haga costumbre. Pueden fantasear y hacer su propia película porno; cada uno tiene su ritmo, unos son más suaves, otros más salvajes, eso lo deciden los protagonistas. El romance es válido siempre.
El egocéntrico: estos personajes que se llenan la boca de ser buenos amantes lo afirman porque ellos se concentran en su placer y por supuesto no saben, ni entienden, ni les preocupa el placer de su pareja. No se vale que uno solo disfrute y, si esto ocurre, hay maneras de que ambos obtengan placer, aunque no pase al mismo tiempo.
Sexo silencioso: algunos prefieren el silencio, otros hablan, otros dicen groserías; todo es válido mientras estén de acuerdo y lo disfruten.
Hacer cosas sin pedir permiso: aquí es importante la comunicación durante el encuentro sexual, por ejemplo, establecer si usan condón o no, que quiere escupirte, que te dé nalgadas, etc., todo es algo acordado. Si no estás de acuerdo, solo díselo.
Ser higiénicos: por más confianza que se tenga, es importante la higiene. No es válido tener una cita y estar “marinado” todo el día. Una ducha antes de una buena faena y quedan todos contentos.
Decir otro nombre: si ya llevan tiempo saliendo y a alguno de los dos se les escapa el nombre del ex, es una situación bastante incómoda, de pronto una desconexión, un corto circuito, todos somos humanos y nos equivocamos; así que deben disculparse y no hacer un drama por algo que a cualquiera le puede pasar.
Alargar el coito: un buen polvo no es el que dure más, ni es una maratón en el que vas a lograr que la satisfacción aumente. Más bien, pasa de fogoso a tedioso, porque ya la lubricación se pierde y la penetración puede llegar a provocar pequeñas laceraciones en los genitales.
Lo real es que, así como todos hemos tenido un mal día, también hemos tenido un mal polvo, así que no te desanimes, lo importante es que no se te convierta en una costumbre y que, por favor, lo hables con tu pareja. Después de todo, la vida es muy corta como para no disfrutarla y desperdiciarla sin tener sexo #sinrecato.
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